Nos levantamos después del mediodia, y encima perdimos varias horas entre el almuerzo y la compra de tickets de tren para Copenhague. Ya siendo las 7 de la tarde encaramos para el museo de Anna Frank. Esta joven se hizo famosa por contarle al mundo con su diario intimo como fue el calvario que viveron con su familia durante
la invasión Nazi en Ámsterdam. Muy impactante para todos entrar a su casa y como siempre, nos hizo pensar una vez mas que mal que se hicieron las cosas algunos anios en la historia del siglo pasado.
A la vuelta decidimos pasar por un Coffe Shop (es como un bar pero que podes fumar marihuana y de paso te la venden ahí) para experimentar la principal atracción de Ámsterdam (aparte de las prostitutas de la zona roja que cobran muy caro y preferimos gastar esa plata en una buena parrillada argentina!!).
Fuimos por lo mas suave y nos compramos un cafecito con un brownie con marihuana, el famoso space cake!!!, que por cierto era muy sabroso. El pastelito contenia 0,2 gramos de Marihuana, casi nada… Terminamos de comer eso y nos retiramos comentando que dicho pastel no nos habia hecho efecto y que era una mentira, y que eramos unos boludos por gastar 6,50 euros cada uno…
Empezamos a caminar en busca de un bar. Esta vez por ser mas temprano encontramos abierto varios camino al hotel. En el medio de la caminata empezamos a sentir los pieces mas pesaditos, la saliva se nos fue espesando hasta tener mucha sed.
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